Semana Internacional de las Personas Sordas

La escuela y la discapacidad auditiva

El diccionario define audición como la capacidad de percibir un sonido por medio del sentido del oído. Es una sensación maravillosa poder escuchar aquellos sonidos que nos traen alegría, que nos provocan nostalgia y que nos muestran la vida. Es una experiencia mágica ver como un bebé reacciona al escuchar la voz de su madre, como sonríe a su dulce melodía. Por otro lado, debe ser una experiencia difícil no comprender lo que pasa a nuestro alrededor. Cuando no escuchamos se limita la posibilidad de comunicarnos con el mundo exterior. Nuestro contexto queda limitado a lo que percibimos con los demás sentidos.

¿Qué puede hacer la escuela con un niño o una niña con discapacidad auditiva? esta es una gran pregunta, y la respuesta puede sonar sencilla, abrirles las puertas y asumir el reto de incluir a un niño o niña que necesita educarse. Las instituciones educativas deben abrir las puertas a la diversidad y aprender con el que aprende. La escuela debe romper las barreras del no puedo o no sé y replantearse desde una óptica diferente donde las discapacidades no sean un tema que limite la entrada a un estudiante. Las personas sordas merecen una educación de calidad donde pueda compartir con sus iguales, y tener la oportunidad de avanzar.

Ingrid Delgado Coordinadora Diplomado Educación Inclusiva y social Opciones transformadoras en el aula y en el centro educativo.