Las dominicanas y los dominicanos ¡sí, disfrutamos leer!…

Estoy segura de que a la mayoría de ustedes les llenará de asombro…pero es la pura verdad. Esta afirmación la hacemos partiendo de la experiencia vivida en las Ferias del Saber de la Regional 10, fruto de los procesos vividos durante todo el año escolar en los diferentes distritos y centros educativos de esta Regional.

En este espacio de socialización disfrutamos al ver estudiantes, maestras, maestros, directoras, directores, técnicas, técnicos, madres, padres, en fin, toda la comunidad educativa involucrada en un derroche de talentos, de aprendizaje, solidaridad, esfuerzos, alegrías, pasión, reencantamiento por lo que hacen. Poner todo el corazón y estar completamente seguras/os de que se puede; se puede transformar la escuela, la comunidad, la vida, el mundo… sí, es posible.

Ver esos rostros alegres, satisfechos, con grandes deseos de seguir trabajando e intercambiando saberes; estas, fueron de las cosas que más disfrutamos en esta experiencia.

También fue la fiesta de la investigación y la lectura: Leer la realidad; leer los rostros, leer las producciones realizadas por niñas/os, adolescentes y jóvenes; leer un buen libro…. Estas posibilidades las ofrecieron las bibliotecas concebidas como espacios abiertos, donde se puede disponer con libertad de sus recursos (libros, literatura infantil, videos, CD, DVD. Niñas, niños, adolescentes, jóvenes y adultos se deleitan al tener la oportunidad de ver los libros, tocarlos, ver sus ilustraciones, sus portadas, hojearlos, olerlos y sentirlos.

Al visualizarse como espacios democráticos, en donde puedes leer a tu antojo, daba gusto ver como niñas y niños disfrutaban de la lectura de diferentes formas; leyendo con estilo, en la comodidad de una silla, tumbadas/os en el suelo, de pie, solas/os, con mamá, papá, con toda la familia, con mi compañera/o…. Es bueno celebrar el hecho de que todas/os estamos llamadas/os, invitadas/os a disfrutar de este espacio, como lo podemos ver aquí: niñas/os, madres, padres, abuelas, policías tuvieron un contacto cercano con los libros y se divirtieron al máximo.

Para que toda esta dinámica se lleve a cabo en estos espacios, es importante rescatar el verdadero sentido de las bibliotecas como espacios alegres, dinámicos, abiertos, democráticos, participativos, en donde todo lo que hacemos tenga como norte siempre la invitación a leer, a disfrutar, a compartir…. La biblioteca debe salir de sus muros, ir donde la gente, mostrar todos sus encantos, todas sus posibilidades, enamorar a las personas, motivarlas, encantarlas…y todo esto es posible si creamos unos espacios agradables, educativos, llenos de magia, de colores, de vida.

Este espacio ha de ser dinámico, provocando una verdadera movilización, en donde se desarrollen diferentes actividades de animación a la lectura y la escritura….Hay que mostrar las nuevas adquisiciones, destacar un tema interesante, que puede ser presentado cada mes “bibliotema del mes”, recibir a las/os visitantes para mostrarles el espacio, sus servicios y recursos “visitas guiadas”; pero también vamos a realizar lectura en voz alta “La hora del cuento”. Este lugar debe considerarse como un emporio cultural.

En este proceso es muy importante la figura de la bibliotecaria/o, visto como animador, animadora sociocultural, una persona cálida, alegre, entusiasta, cercana… que sólo con su mirada y su sonrisa te invite a leer….